Al abrigo de la noche de la hermosa Paris, la ciudad del amor y el placer, oculto tras la elegante fachada de la sofisticación y exclusividad, se alza en todo su esplendor un club nocturno que durante años ha atraído a sus clientes con la promesa susurrada de hacer realidad cualquier fantasía o sueño erótico.

El Des Plaisirs Ocultte lleva escrito a fuego y en letras mayúsculas la palabra placer, en el descubrirás un mundo de sensualidad, magia y misterio. Pero el mito de este local comienza a partir de sus propias dueñas: Camille DeLancre y Charlotte Blanchard. Vampiras. La raza inmortal sometida por la sangre existe y ellas son la prueba de ello. Y asimismo, y en honor a los suyos, decidieron dividir el DPO.

La zona acta para todos los públicos, pero no para todas las edades, lo que todos creen que es el local en sí mismo y donde se encuentra la mayor atracción entre los humanos, llevada por Charlotte. Y el lado oculto del DPO, dirigido por Camille, y la mayor atracción entre los miembros de la raza, una zona exclusiva para clientes vampiros en los subterráneos del local, donde podrán mostrarse con más libertad y sin miedos, tomando esclavos de sangre para su propio beneficio y placer.

Pero lo bueno dura poco y como siempre, después de la calma viene la tempestad.

De los oscuros y peligrosos suburbios de París surge una sustancia nueva, extravagante y única, una droga echa a partir de la sangre de vampiros puros. Su creador es un misterio para todos, incluso dentro de los vampiros, sin embargo, el beso carmesí tenía todas las papeletas para ser un éxito entre humanos, y así fue. La sensualidad, erotismo y cualidades de la persona que lo ingiere se acentúan, haciendo sentir a esos desdichados por dos horas como un inmortal.

Pero la discordia se desata cuando los vampiros comienzan a tomarla y, poco a poco, se descubre con horror un devastador efecto secundario que solo les afecta a ellos. Con el paso del tiempo y de su ingestión diaria, el vampiro acaba convirtiéndose en un monstruo irracional y que solo vive por y para la sangre, incapaz de controlar su propia sed y matando cuando bebe sin necesidad.

El beso carmesí es una sustancia tanto benigna como maligna. Dos caras de una misma moneda. Lo que es un estimulante para los humanos es una maldición para los vampiros.

Y se inicia la guerra.

Pese a que el DPO prohíbe la venta del beso carmesí en vampiros dentro de sus dominios y busca la forma de encontrar al creador y controlar la situación, la venta de la droga roja es muy amplia. A los traficantes no parece importarles demasiado sus consecuencias con tal de ganar dinero y las cosas comienzan a descontrolarse en Paris. Incluso, los antiguos cazadores de los fríos han regresado a las andadas tras ver como su hermosa ciudad se tiñe de rojo por muertes humanas, culpando directamente al DPO.

Los asesinatos aumentan, la corrupción es visible para cualquier que mire dos veces, pero son muchas personas las que no quieren que el legendario DPO cierre sus puertas o desaparezca de sus calles el beso carmesí, así como también son muchos los que desean su erradicación total, al igual que piden la cabeza de las propias dueñas.

¿Y tú, de qué lado estás, mortal?